Una fiesta en La Placilla pone fin a la completa agenda de fiestas de verano en los barrios portuenses

La Placilla se ha convertido en la tarde-noche de este domingo en un espacio de celebración y convivencia con la Fiesta de los Milagros, un evento organizado por la Concejalía de Relaciones con la Ciudadanía, dirigida por el teniente de alcalde Javier Bello. La cita congregó a numerosas familias portuenses y estuvo marcada por la convivencia, la tradición y un ambiente festivo que sirvió como cierre del programa de eventos lúdicos del verano organizados por esta concejalía. 
 

La fiesta, en la que también estuvo presente el alcalde, Germán Beardo, ha coincidido con el montaje de la tradicional alfombra de sal, que cada año engalana las calles en la víspera del Día Grande de la Virgen de los Milagros, patrona de la ciudad. Este tapiz de sal, que recorre la calle Palacios (entre Plaza de España y Nevería) y la calle Luna (entre San Bartolomé y Nevería), aportó un marco simbólico y cultural a la celebración. Los más pequeños pudieron dibujar imágenes de la Patrona y hacer chapas con esa imagen pintada.

Frente a la papelería Carmelina, el espacio de La Placilla se transformó para acoger una variada programación pensada para todos los públicos. Juegos infantiles, castillo hinchable, talleres de manualidades, actividades de psicomotricidad, minidisco, lanzamiento de hachas, photocall y decoración ambiental llenaron la tarde de color, risas y participación. La música ambiental y las numerosas sorpresas añadieron dinamismo a una jornada que hizo las delicias de pequeños y mayores.

Javier Bello expresó su satisfacción por la respuesta ciudadana: “La Fiesta de los Milagros ha sido un éxito de participación y un claro ejemplo de cómo la colaboración ciudadana y el esfuerzo de nuestro Ayuntamiento consiguen generar espacios de encuentro, ocio y tradición en el corazón de nuestra ciudad. Seguiremos trabajando para que El Puerto viva con intensidad sus fiestas y que los vecinos y vecinas las sientan como propias”, afirmó.

Con esta actividad, pocos días antes del inicio del curso escolar, el Ayuntamiento concluye un verano repleto de propuestas lúdicas en distintos barrios de la ciudad con las que durante todo el verano hadinamizado la vida social y cultural de El Puerto y reforzado el sentimiento de comunidad entre los vecinos.